La madre de las víctimas denunció que su hija Pamela Gorosito «hacía la denuncia y no lo buscaban». El principal sospechoso sigue prófugo.
Pamela Gorosito de 23 años y su hermana Ramona de 27 fueron asesinadas a tiros y golpes el viernes en la localidad de Yuto, Jujuy. Por el femicidio buscan a la ex pareja de la menor de las víctimas, Javier Broy, de 37, quien tiene antecedentes por violencia de género y ya había estado detenido.
En tanto Graciela Segundo, madre de las víctimas, fue herida a golpes en la cabeza y trasladada de urgencia al hospital Oscar Orías, de Libertador General San Martín, donde sigue internada.
Desde el hospital, Graciela afirmó que su hija Pamela había denunciado en retiradas ocasiones a Broy: «Ella lo denunciaba y (la policía) le decía que ya lo iban a buscar».
Reveló incluso que el mismo día del femicidio, su hija hizo una denuncia y la policía “se demoró en venir”. “El tipo estaba en el portón de mi casa. Andaba armado con puñal“, denunció la mujer y sostuvo que “cuando vino la policía, el tipo se escondió en el monte”.
Todo comenzó la noche del viernes, cerca de las 23, en un domicilio ubicado en el barrio Sur de Yuto, unos 160 kilómetros noreste de San Salvador de Jujuy, donde Pamela, madre de dos niños, fue sorprendida por su ex pareja, quien la golpeó y le disparó.
De acuerdo a los investigadores, ese mismo día Broy había ido hasta la casa de la víctima, la había golpeado y amenazarla con matarla, lo que ella luego denunció en la comisaría local.
Broy había estado detenido luego de que en diciembre último Pamela lo acusó de «violación de domicilio en un contexto de violencia de género».
Gabriela y Ramona no se encontraban en la casa al momento del femicidio. “Me llamó mi vecina y me dijo que vuelva, que el papá de los chicos le estaba pegando a mi hija. Yo no podía correr y mi hija mayor con mi marido volvió a la casa. Mi hija se cansó a mitad de camino y mi marido llegó y se dio con que ya la había matado”, relató la madre de las víctimas.
«En el camino (aparentemente escapando) Broy la encontró a mi otra hija y la mató y al último me enfrenta a mí con la escopeta», contó.
Según Gabriela, ahí Broy le advirtió: «La voy a matar usted”.
Fue entonces cuando ella reaccionó: «Le agarré el caño de la escopeta, me pegó en la frente y me desmayé, perdí la conciencia. Me levanté sola, empecé a gritar y me ayudaron los vecinos».
La madre de Pamela y Ramona, ambas asesinadas, recordó que su hija menor “hacía denuncia y no lo buscaban. Siempre la amenazaba y la terminó matando a mi hija y a la otra”.
Gabriela indicó que Broy ex boxeador y que ya le había pegado a ella en otras ocasiones: “A mi hija también la había golpeado el año pasado muy feo cuando ella tenía al bebé en los brazos”.
“Estamos desprotegidas, la policía toma las denuncias y quedan ahí”, insistió Gabriela, quien forma parte de un grupo de mujeres que lucha para erradicar la violencia de género en Jujuy.
Indicó también que el fiscal de la causa, José Alfredo Blanco, todavía no se había comunicado con ella.